Una hermosa adición a tu jardín. El laurel de flor es un clásico del paisajismo, por su bajo consumo hídrico y sus bonitas flores en primavera. De hojas perennes primero crece verticalmente para luego ensanchar como un arbusto muy bonito.

Es una planta de pleno sol. No necesita una alta frecuencia de riego, pero sí que cada vez que lo mojes sea con abundancia, siempre en la base de la planta. Puede resistir el invierno una vez trasplantado a tierra, pero nunca hace daño protegerlo de las heladas cuando son plantas jóvenes.

Formato: bolsa de trasplante. Plantas desde 90 cm de altura. En primavera pueden estar con flor (de color fucsia) pero puede variar su presencia.